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Siembra: Una obra histórica, 40 años después..

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En otras circunstancias Rubén Blades y Willie Colón estarían hoy de gira mundial despertando conciencias con el discurso social de “Siembra”, el disco más vendido en la historia de la salsa, cuyo 40 aniversario se conmemora en 2018.

Pero, tras un pleito judicial, parece que en definitiva el binomio jamás coincidirá en un escenario, aunque Willie ha dicho que estaría dispuesto a pasar la página y colaborar con el cantautor y actor panameño.

Desde 2008 Colón no lanza un disco. Su más reciente entrega es “El Malo Vol. II: Prisioneros del Mambo”, cierre de un ciclo discográfico de aparente telón en descenso para una de las carreras más apasionantes de la música latina.

Rubén, en cambio, ha continuado su derrotero como productor independiente, publicando discos como “Cantares del Subdesarrollo”, “Eba say ajá” con Cheo Feliciano, su concierto de despedida “Todos vuelven” con Seis del Solar en el Coliseo José Miguel Agrelot, “Tangos”, “Son de Panamá”, “Salsa Big Band” y “Medoro Madera”, sin considerar que actualmente finaliza, según informó su representante Daniel Aisemberg, un proyecto con la Orquesta de Jazz del Lincoln Center, junto a la que se presentó en 2014 con Wynton Marsalis y su esposa Luba Mason.

La fórmula le ha funcionado: sus discos se venden por Internet como pan caliente y los mercadea muy bien desde su plataforma digital rubenblades.com, portal en que también incluye noticias, fotos y columnas de opinión sobre asuntos políticos y de actualidad mundial.

En otras palabras, a los 70 años, cumplidos el pasado 16 de julio, Blades no necesita de Willie, aunque se debe reconocer, con mucho respeto, que ninguno de sus trabajos iguala el impacto sociocultural de “Siembra” con el maestro Colón.

En 2018, la trascendencia de “Siembra”, 40 años después, es indiscutible. Lo grabó a los 30 años en La Tierra Sound Studios en Nueva York, con el respaldo de la orquesta de Colón, a la que entró en sustitución de Héctor Lavoe, a quien Fania lanzó como solista y cuyos éxitos, como es el caso de “Juana Peña”, necesitó cantar a petición popular.

El antecedente de “Siembra”, álbum mezclado por el experimentado ingeniero Jon Fausty y que consiste de arreglos de Willie, Louie Cruz, Carlos Franzetti y Luis ‘Perico’ Ortiz, es el elepé “Metiendo mano” de 1977.

La pobre esperanza de “Pablo Pueblo”; la metáfora de la explotación cimarrona en “Plantación adentro”; las pesadillas de los emigrantes latinos en “La maleta”; los efectos del cambio climático en “Lluvia de tu cielo”; el relativismo humano y filosófico de “Según el color” y el llamado a la unidad civil en “Pueblo” propiciaron que en 1977 la quiniela Blades-Colón rompiera esquemas y articulara un nuevo discurso como paradigma en la salsa, al que no pocos respondieron con receptividad, como se evidenció en “Julián del Valle” grabada por Perico Ortiz y “Los entierros” por Cheo.

Así, con “Siembra”, Blades-Colón revolucionaron la salsa, en parte debido a la repercusión de una canción incomprendida por los sabios de la industria: el relato, cuasi cinematográfico de “Pedro Navaja”, inspirado en el estándar del jazz “Mack The Knife”, canción de Bobby Darin, grabada por los grandes del jazz.

En Fania el muy recordado amigo Víctor Gallo fue uno de los que objetó a “Pedro Navaja” por su extensión: ¡7 minutos con 23 segundos de duración! Pero pronto se convenció de que Willie y Rubén, en parte gracias al arreglo de Perico, establecían un precedente al escalar las listas de éxitos con la canción más larga en la historia radial de la salsa que, por la coherencia de su relato, era imposible y muy difícil editar, incluso para un 45rpm.

Con “Siembra” ampliaron el discurso de “Metiendo mano”, denunciando la frivolidad, la asimilación y la transculturación de los pueblos con “Plástico”, que evocó el sonido disco de la época a la cabeza de los Bee Gees y el éxito de “Saturday Night Fever” con el entonces incipiente John Travolta.

“Ojos”, del Isabelino Johnny Ortiz y quien contribuyó a “Metiendo mano” con “Lluvia de tu cielo”, fue otro acierto, al igual que la alentadora y emancipadora “Siembra”, que despertó no pocas conciencias e inquietó muchos corazones en el Caribe y América Latina.

Con “Siembra”, 40 años después y con otras canciones como “Manuela”, “Pablo Pueblo”, La maleta”, “Pueblo”, “El entierro”, “Tiburón”, “Madame Kalalú”, “¿De qué? y “Ligia Elena”, cuya versión original fue un merengue grabado para la secuencia original de “Siembra”, hoy Blades-Colón estremecerían los escenarios del mundo.

Sin embargo, parece imposible. Quizá por lo costoso y prohibitivo que sería para un productor embarcarse en un proyecto de tanta envergadura en asuntos de logística. Tal vez por la recesión y contracción de la economía mundial. Mas sin duda alguna por las diferencias profesionales, legales y personales surgidas entre estas leyendas de la salsa tras el concierto “Siembra” de 2003, que presentaron Ariel Rivas y César Sainz, que enfoca uno de los promotores demandados, Robert J. Morgalo en su libro “Decisiones”, según expone “una mirada al interior de la batalla legal” entre el icónico dúo.

Consuela, empero, el elepé original de “Siembra”; la versión del 25 aniversario remasterizada en cd por Fania en 1993 con las fotos y las letras y el disco “Siembra Live”, grabado el 22 de marzo de 1980 en el Capitol Theather de Nueva Jersey, que incluye la secuencia, excepto “Siembra” y redondea con “Plantación adentro”.

Mi favorito es “Siembra: 30th Anniversary Edition”, producción de Dean Rudland para la serie “Masterworks” conceptualizada para Emúsica por el amigo Giora Breil.

Este disco, lanzado en 2008, incluye ‘liner notes’ del ingeniero Jon Fausty y del historiador Agustín Gurza. A la secuencia de “Plástico”, “Buscando guayaba”, “Pedro Navaja”, “María Lionza”, “Ojos”, “Dime” y “Siembra” añadieron la toma dos de “Dime” y “Pedro Navaja”; la pista de “Plástico”, el merengue “Ligia Elena” y el sencillo “Dime”.

Consta, además, de las fotos de Fabian Ross y las imágenes de cuatro infantes de África, China, Estados Unidos y América Latina tomadas por el fotógrafo J. P. Posse para la carátula diseñada por la artista Irene Perlicz.

Es una edición digna de atesorar, aun por la reproducción en la literatura interior de la tirilla “Pedro Navaja: A Comic Strip Novela” que el artista Izzy Sanabria publicó en su revista Latin NY en abril de 1979.

En síntesis, “Siembra”, 40 años después es un suceso irrepetible e imposible de igualar por el binomio, que en 1995 se reunió en el disco “Tras la tormenta”, grabado a larga distancia para Sony Tropical sin el corazón, el afecto y las ansias de innovar de 1978.

Por Jaime Torres Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular

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